Pero seguro que me acusarán de ello, el motivo no es otro que el llamado «Día del Padre». La Iglesia Católica tiene el 19 de marzo en su santoral desde el siglo XV, conmemorando la vida de José, esposo de María, el padre adoptivo de Jesús (padre putativo P.P., de ahí la denominación popular a los José como «pepes», pero P.P. significa – padre sin serlo naturalmente -). El dicho popular del refranero español, tan sabio él, define a muchos miembros de la iglesia de esta forma: «el más tonto a los doce años cura». Habría que añadir, «algunos llegaron a obispos».
Y para colmo, en muchos casos han demostrado estar más interesados en lo material que en lo divino, una muestra fue el 8 de diciembre, se celebraba el día de la madre desde 1854, cuando el Papa Pío IX definió dogmáticamente esta celebración con la Inmaculada Concepción. Pero a la Iglesia poco lo importó lo que dijera uno de «sus santos padres», trasladó dicha festividad al primer domingo de mayo, en 1965, todo por intereses comerciales a sugerencia de Galerías Preciados y el Corte Inglés, aduciendo ser más acorde con la celebración que se celebra en el mundo, dado que en diciembre en España hay muchas fiestas a celebrar, siendo más exclusivo celebrarla en mayo. ¿Por qué no hacen lo mismo con el día del padre? cambiando el día, dado el anacronismo, por espurio, de la fecha para el santo protagonista, José.
Partiendo que la adoración a santos cristianos solo se da con profusión en la Iglesia católica, (observa en el santoral el día del patrón/a de tu localidad, hay cerca de 10 santos ese día casi seguro, y posiblemente una virgen de nombre diferente al resto). Esta es una de las diferencias de la Iglesia Católica con otras iglesias cristianas, al ser claramente politeísta frente al resto al no tener tal profusión de personajes para adorar, ni siquiera a María, tienen básicamente uno, Jesús.
– Volvamos al Día del Padre, surgió en Estados Unidos en 1910 celebrándose el tercer domingo de junio para reconocer y honrar la labor de los padres en la crianza de sus hijos, (- conmemorando el día de que cientos de hombres murieran en un gran accidente minero en diciembre de 1907 -), se celebra en el continente americano desde 1924 con excepciones, Bolivia y Honduras lo celebran el 19 de marzo. Argentina, Uruguay y República Dominicana en Julio. El resto de las comunidades cristianas del mundo lo celebran en junio también, en Rusia el Día del Padre y de la Madre lo celebran el 23 de febrero, día de los defensores de la Patria.
En España el 19 de marzo lo propuso como día del padre en 1948 Manuela Vicente Ferrero, maestra de una escuela de la Dehesa de la Villa en Madrid, y en 1953 la propaganda de Galerías Preciados difundió la idea con campaña en prensa y radio, más tarde se sumó El Corte Inglés, sumándose próceres de la Iglesia, sin entender los Evangelios y la apoyaron, considerándola idónea frente a los festejos que se celebraban provenientes de culturas ancestrales.
– Se celebra el 19 de marzo como día del padre coincide con el Equinocio de primavera de la cultura celta, «Ostara», representando la victoria contra la oscuridad del invierno y la llegada de la luz, momento en el que las diosas femeninas despiertan de su descanso para cubrir sus tierras de fertilidad; fiesta que en el paganismo se celebraba por todo lo alto.
La Iglesia Católica tenía por costumbre cambiar toda conmemoración pagana tornándola en católica, pero eligió mal al personaje en este caso, dado que si el padre real de Jesús según la Iglesia Católica fue «el Espíritu Santo» (un palomo), ¿no estará convirtiendo la festividad en un sacrilegio? ¿dónde está la caridad cristiana? Han elegido a un pobre hombre, José, remarcando el adulterio de María, su esposa, e indirectamente el día de Asmodeo sirviente de Satán, archidemonio que se asocia al deseo carnal, el disfrute con el adulterio y la ruptura de parejas ¿no había otra fecha, por ejemplo, el 1 de noviembre u otro personaje? Podría ser san Juan que lo celebran en junio, otro error de ejemplaridad o utilidad que desperdició la Iglesia (más abajo se explica).
– 1 de noviembre, día de todos los santos, ahí también está incluido José (ver santoral), la Iglesia Católica realizó el cambio pertinente al Equinocio de otoño de tradición celta, festividad en honor a Mabon, Dios de las viñas, celebrándose «la última cosecha». En cambio, ese día la Iglesia Católica venera figuras religiosas como protectores y guías de diversos grupos, comunidades o usos cotidianos. Algunos se han convertido en patrones de profesiones específicas, por ejemplo, San Lucas es considerado patrón de los médicos y los cirujanos debido a su profesión como médico. De manera similar, Santa Catalina de Siena patrona de los enfermos debido a su dedicación a ayudarlos. A través de la historia muchos otros santos se han asociado con profesiones específicas, entre ellos San Cristóbal como patrono de los conductores y aparece de nuevo San José como patrono de los carpinteros, día más digno y menos oneroso para ese pobre hombre, con la peculiaridad de que está dos veces en el santoral católico. Se podría celebrar el día del padre en junio, para paliar el error de aquellos padres de la Iglesia con José, se podría cambiar el Día del Padre a junio, como ocurre en Estados Unidos, Reino Unido, Francia, India, Sudáfrica, Filipinas, casi toda hispanoamérica, Líbano, Egipto, Jordania, Siria, en los territorios palestinos, Uganda….
– También cambió a católico el Solsticio de verano, donde se venera a San Juan, según el Evangelio el único apóstol que acompañó a María a los pies del crucificado en el Monte Calvario. Fiesta pagana desde tiempos inmemoriales, la tradición encendía miles de hogueras en la noche del solsticio de verano, el día 21 de junio, para mandar fuerza al sol en su paso hacia los días cada vez más cortos, el solsticio de verano tiene el mayor período de luz con el día más largo del año. Según los Evangelios de Mateo, Marco y Lucas se hizo oscuridad en el momento de la crucifixión, «las tinieblas cubrieron toda la tierra desde la hora sexta hasta la nona», Mateo agrega el fenómeno de un temblor en la tierra y la rajadura de rocas. ¿No hubiera sido mejor santo Juan para el 19 de marzo?, ese día se encienden las hogueras en Valencia, siguiendo la tradición pagana, así la Iglesia hubiera dado su toque católico, «hacer la Luz en la Crucifixión», quienes establecieron esa fecha no leyeron los Evangelio o no entendieron su significado, dar luz al sacrificio. Un cambio de personajes sin importancia, incluso para los Centros Comerciales, y se integraría esta Iglesia a la lógica mundial, dándole un toque «divino».
– Donde únicamente acertó la Iglesia en tornar una fiesta pagana en católica, fue en el Solsticio de invierno – por coincidencia de personajes -, es considerado como el nacimiento del sol con la noche más larga del año y el día siguiente el más corto. En la Antigua Roma era unas de sus festividades más importantes del año y se pueden considerar como el verdadero origen de la Navidad tal y como la conocemos actualmente. Una festividad en honor al dios Saturno (defensor de la agricultura), conocida como las «Saturnales», se celebraba en Stonehenge (Reino Unido), llamado «Templo del Sol», representado un renacer para la humanidad; una espiritualidad asociada con – el triunfo de la luz sobre las sombras – o – el fin de los días largos -, y otras interpretaciones normalmente religiosas que le otorgan a la luz el símbolo de la esperanza, la fortaleza y la divinidad. Cuando el cristianismo comienza a propagarse en Europa asimila estas fiestas solsticiales a sus propios ritos y símbolos. De allí que se fija la fecha del nacimiento de Jesús en el Solsticio de Invierno, en anteriores culturas también fue el natalicio de sus principales dioses, relacionados con el Sol como: Osiris, Horus, Apolo, Mitra, Dioniso/Baco, etc.