Con la dictadura el honor era lo más importante, para ellos claro, pero pasamos a otra forma de Estado a través de la transición, llamado Democracia, ahora nos hemos dado cuenta que era la “Partidocracia”, que se ha desarrollado hasta  llegar a su escala superior la “Corruptocracia”, donde de nuevo está de moda el honor entre los políticos cuando están inmersos en presuntas corruptelas en beneficio propio o de su partido. Habrá que recordarles a todos ellos, que al estar bajo sospecha de corrupción, su honor ya está en entredicho, porque según la RAE, «honor es la cualidad moral que lleva al cumplimiento de los propios deberes respecto del prójimo y de uno mismo. La honestidad no puede basarse en los propios deseos de las personas.  Actuar en forma honesta requiere de un apego a la verdad que va más allá de las intenciones. Un hombre no puede actuar de acuerdo a sus propios intereses, por ejemplo obviando información, y ser considerado honesto».

Pero estos caraduras, amenazan a todos aquellos que supuestamente informen de acciones contra ellos o su partido, y de alguna manera también a los jueces, al ser los ejecutores de las investigaciones que les llegan por otras vías y si no, tenemos un ejemplo, “Baltasar Garzón», separado de la judicatura por sus propios compañeros, sospechosamente o presuntamente por presiones partidistas.

¿Y ahora que pasará?, si hay una avalancha de denuncias contra el honor por todos los supuestamente deshonestos encausados, esto podría llevar, como ocurrió con Garzón, al que juzgaron y expulsaron antes que condenar a los implicados en la  Gürtel, muchos de ellos en libertad bajo fianza en la actualidad.

Denuncias vendrán, como ya han amenazado, por los “papeles”de Bárcenas, que salieron a la luz por El Mundo y El País, donde se registra la supuesta financiación ilegal del PP a lo largo del tiempo y del presunto pago de retribuciones a la cúpula del partido no permitido por la ley pues muchos de los que supuestamente recibieron dinero tenían incompatibilidad por formar parte del Gobierno. “Papeles” donde aparecen supuestas donaciones empresariales que superaban los límites de la Ley de Financiación de Partidos Políticos, empresas constructoras que supuestamente pagaron al partido, algunas de ellas situadas entre las más grandes del país, y de significados líderes políticos, entre ellos los máximos responsables del PP en la actualidad.

El Periódico de Catalunya, asegura que Convergencia encargó en 2009 a Método-3 una investigación sobre Felip Puig y CDC dice que nunca ha encargado espiar a nadie y anuncia acciones legales. El espionaje de la entrevista de Camacho con la ex de un Pujol, en un restaurante, que presuntamente implican tanto al PP como al PSC. ¿Qué es más deshonesto?, espiarlos o la corrupción no denunciada por los implicados, la consecuencia ha sido, detención de los investigadores contratados y los responsables de las presuntas corruptelas en libertad.

Diego Torres del caso Nóos, dice que el abogado del duque le ofreció dinero a cambio de su silencio, le recomiendo guardar la información que seguro tendrá, donde implica aún más a la corona y otros políticos, Wikileaks es una buena caja de seguridad y denuncia, al declarar los negocios de familiares del Jefe del Estado, sacando a la luz correos implicando a parte de la familia y su entorno, incluso a una gran amistad como Corinna que organizó en Botsuana la cacería de elefantes, donde el jefe del Estado estuvo acompañado por varios empresarios españoles que sufragaron el viaje en jet privado y la cacería. O declarando las negociaciones que se realizaron en su residencia oficial, La Zarzuela, con la presencia de Francisco Camps (el comprador de trajes) y Rita Barberá (la que considera una fruslería los regalos percibidos), seguro que no los únicos, no me extrañaría que aparecieran políticos, empresas  o particulares extranjeros.

Bárcenas parece inmune al tener todo bajo notario, dos años más cobrando del PP, de viaje al extranjero, y disfrutando de sus millones con total impunidad, Diego en libertad junto a uno de sus socios con escolta, al que no echan del palacete a pesar que debe ocho millones de fianza, y a cualquier mortal un banco echa a la calle por solo veinte mil euros de deuda.

Estos casos son los más recientes y los que acaparan las noticias tanto en TV como prensa, pero hay infinidad de pequeños trapicheos a todas las escalas que se saldan con indultos muy sospechosos. Tampoco debemos olvidarnos de los sinvergüenzas que recibiendo dinero público, lo desvían en su provecho como indemnizaciones multimillonarias en su despedida  y la Justicia no sabe nada de ello, pero condenan a una madre a año y medio de cárcel por utilizar una tarjeta encontrada, gastando 190 € en pañales y comida para sus hijos, al estar en el paro tanto ella como su marido.

Cosa asombrosa el  honor  de los políticos y de los presuntos corruptos, pero ¿quién repara la ofensa a la ciudadanía?, pisoteada por aquellos a quienes entregaron con sus votos la dirección de la nación, siendo la única honesta porque tiene esa cualidad moral de la que carecen muchos políticos, cumpliendo sus deberes como son el pago de impuestos, la obediencia y acatamiento a la justicia, justicia que parece distinta para los representantes políticos. Exigimos esa reparación de una manera, con JUSTICIA en mayúsculas.